El informe realizado por el Colegio Profesional de Administradores de Fincas, distingue diversos grupos de morosos, el más grande (40%) corresponde a los propietarios que no pagan por una causa selectiva, es decir, escogen la prioridad y el orden de las facturas a pagar, retrasando la cuota de la comunidad.
La morosidad de las comunidades de propietarios de Madrid se ha incrementado un 46% desde 2009 a causa de la crisis económica y afecta al 22% de las fincas compartidas con deudas de más 375 millones de euros, según el estudio elaborado por el Colegio Profesional de Administradores de Fincas de Madrid.
«Existe una creciente preocupación ante el desarrollo de la morosidad en el núcleo de las comunidades de propietarios», explicó el presidente del Colegio Profesional de Administradores de Fincas de Madrid, Miguel Ángel Muñoz, durante la presentación del informe realizado con los datos de 150 administradores de fincas, que gestionan un total de 3.000 comunidades.
El informe distingue diversos grupos de morosos, el más grande (40%) corresponde a los propietarios que no pagan por una causa selectiva, es decir, escogen la prioridad y el orden de las facturas a pagar, retrasando la cuota de la comunidad.
El 26% de los morosos corresponde a personas insolventes reales, afectadas en su mayoría por el paro y la falta de recursos provocados por la crisis económica. Con este grupo, las comunidades de vecinos suelen ser más indulgentes en la reclamación de las deuda.
En tercer lugar, el 22% de los morosos son los considerados «profesionales», que se caracterizan por el retraso habitual y sistemático del pago de las facturas y donde la problemática del cobro se prolonga en el tiempo.
El 12% de los morosos son las entidades financieras y las promotoras, acumulando el 30% de la deuda total. La principal causa de impago de las cuotas de las viviendas que se han quedado en adjudicación y sin vender es la situación privilegiada respecto al resto de propietarios.
El administrador de fincas Gustavo García señaló que este fenómeno «se da cada vez más» y que, además, las promotoras y los bancos «son los que más tarde pagan con retrasos que llegan hasta dos años». «Durante el periodo de adjudicación no abonan las cuotas y, después, tardan otros seis meses más», apuntó.
Para la gestión de los impagos el Colegio de Administradores de Fincas de Madrid ha puesto en marcha junto a las empresas Acción Legal, Logalty, Arbitralia, El Derecho Editores, Mapfre y Arag el Programa de Lucha contra la Morosidad en las Comunidades Autónomas (PLCM), presentado este miércoles junto al estudio.
El PLCM es de uso exclusivo para administradores de fincas de Madrid y permite a las comunidades dotarse de un sistema de prevención para posibilitar el cobro de las cuotas, con las máximas garantías legales y el respaldo de profesionales que se encargan de todo el proceso, a coste cero para la comunidad.